la mordaza gumersindo meiriñoMientras leo el salmo treinta y ocho, no dejo de pensar en lo interesante que sería tener una mordaza de ese tipo. Muchísimos problemas se solucionarían si los seres humanos la utilizáramos con frecuencia.
Dice el salmista: “pondré una mordaza a mi boca”. ¿Qué quiere decir?

Cuenta Luis. “Reconozco que he ido un poco lejos, que he insultado a mi padre, luego a mi esposa. Y cuando mi hijo me quiso parar, para que no siguiese ofendiendo a todo el mundo, le “largué la boca” a él también y le dije entre otras cosas que era un inútil que no servía para nada, que no había terminado sus estudios, que era un fracasado….Lo que pasó a partir de entonces es lo más parecido al infierno. Nadie me habla, nadie me saluda en casa, nadie “me da artículo”…., les pedí disculpas…., pero no lo entienden que yo no pienso de esa forma, que fue en un momento de enojo. El que estoy enojado ahora, soy yo, qué quieren que haga si ya les pedí perdón…., qué quieren que haga…”. El pobre Luis no para de llorar.

Querido Luis, le digo, lee el salmo treinta y ocho con calma, “pon una mordaza en tu boca” y empieza a analizar cada una de las palabras que dijiste porque eso es lo que hay en tu corazón. Sé consciente de lo que “vomitó” tu boca y de cómo lo “vomitó”. Purifica tu corazón. Lava tus “heridas”. Reconoce lo que has dicho. Eso que has salido de tu boca está pegado en tu corazón. Si lo reconoces, lo podrás limpiar. Podrás reiniciar el diálogo con tu esposa, con tu padre, con tu hijo….

Esa es…, (no hay otra), -la que impedirá que salga baba de tu boca-, la mordaza.
Gumersindo Meiriño Fernández

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2 thoughts on “La mordaza. Buena Noticia

  1. Gracias por tu aportación Nora. Creo que tienes razón, siempre hay redención en el espíritu para las personas de buena voluntad y corazón recto.

  2. Junto con el titulo de la «Mordaza»,le pondría Somos poca cosa ante Dios.Justamente por eso, porq elegimos hablar con heridas y pensamientos oscuros, es q no somos nada ante el.De hecho, ya somos apenas un soplo, somos forasteros en su casa y peregrinos en esta vida, que hacemos lo posible para DESHONRARLO.Si honraramos a Dios, tendriamos otra actitud.y cada uno, como ese sr.Luis, debemos cargar con esa consecuencia, si,no solo al abrir la boca hacemos daño!! Muchas veces, incluso,con mordaza, pero con silencios y actitudes egoistas…Lo bueno de esto, es q podemos INTENTAR REDIMIRNOS..

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