Foto Natalia Plazaola
Foto Natalia Plazaola

Uno de los pesos que lleva encima la humanidad es el de la finitud.
Los místicos nos han enseñado de mil formas que este viaje por el planeta tierra de camino a las muchas moradas que Dios tiene preparadas para nosotros, -más allá del planeta tierra-, no tiene por qué ser un drama sino un descanso en los brazos el Padre Dios. El tiempo es un regalo que hemos de aprovechar para hacer el bien, para vivir en paz, para gozar de la dicha de estar vivos…,
¡Decide qué haces con tu tiempo! Recuerda ¡es limitado! ¡No lo desperdicies!
Feliz jornada, un hermoso salmo y un hermoso día para llenar el tiempo de amor y grabarlo en el cielo, en el corazón de Dios, en la eternidad. Bendiciones.

SALMO 90-89

Señor, tú has sido nuestro refugio
de generación en generación.Antes que naciesen los montes
o fuera engendrado el orbe de la tierra,
desde siempre y por siempre tú eres Dios.

Tú reduces el hombre a polvo,
diciendo: «Retornad, hijos de Adán».
Mil años en tu presencia
son un ayer, que pasó;
una vela nocturna.

Los siembras año por año,
como hierba que se renueva:
que florece y se renueva por la mañana,
y por la tarde la siegan y se seca.

¡Cómo nos ha consumido tu cólera
y nos ha trastornado tu indignación!
Pusiste nuestras culpas ante ti,
nuestros secretos ante la luz de tu mirada:
y todos nuestros días pasaron bajo tu cólera,
y nuestros años se acabaron como un suspiro.

Aunque uno viva setenta años,
y el más robusto hasta ochenta,
la mayor parte son fatiga inútil,
porque pasan aprisa y vuelan.

¿Quién conoce la vehemencia de tu ira,
quién ha sentido el peso de tu cólera?
Enséñanos a calcular nuestros años,
para que adquiramos un corazón sensato.

Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo?
Ten compasión de tus siervos;
por la mañana sácianos de tu misericordia,
y toda nuestra vida será alegría y júbilo.

Danos alegría, por los días en que nos afligiste,
por los años en que sufrimos desdichas.
Que tus siervos vean tu acción,
y sus hijos tu gloria.

Baje a nosotros la bondad del Señor
y haga prósperas las obras de nuestras manos.

One thought on “Salmo 90 (89), cada día treinta de enero, no desperdicies tu limitado tiempo

  1. Gracias por tus palabras , gracias por ayudarme a disfrutar de mis tiempos en la tierra , administrar mis energías en lo esencial, aprovechar cada minuto haciéndolo productivo en todo aspecto, gracias porque hicieron de mí un mejor humano .. bendiciones..

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