Alto do Cebreiro, Fray Paco Castro

Jesús le contestó: «En verdad, en verdad te digo: el que no nazca de agua y de Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. Lo que nace de la carne es carne, lo que nace del Espíritu es espíritu.
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Salmo difícil. Pero es bueno que la mente, a veces, no abarque el sentido profundo y se sumerja, «más allá de la mente«, donde vive el espíritu.
Entonces empieza a entender con los sentidos internos, y le guía la sabiduría interior. Léelo sin entender pero acepta la luz que pueda entrar en tu corazón, al recitarlo.
Jaculatoria: Tañed en honor del Señor.
o también: La esperanza del humilde no perecerá
Paz y Alegría hasta mañana

Salmo 9 B

Tañed en honor del Señor- Adonai, que reside en Sión;
narrad sus hazañas a los pueblos;
él venga la sangre, él recuerda,
y no olvida los gritos de los humildes.

Piedad, Señor- Adonai; mira como me afligen mis enemigos;
levántame del umbral de la muerte,
para que pueda proclamar tus alabanzas
y gozar de tu salvación en las puertas de Sión.

Los pueblos se han hundido en la fosa que hicieron,
su pie quedó prendido en la red que escondieron.
El Señor- Adonai apareció para hacer justicia,
y se enredó el malvado en sus propias acciones.

Vuelvan al abismo los malvados,
los pueblos que olvidan a Dios.
El no olvida jamás al pobre,
ni la esperanza del humilde perecerá.

Levántate, Señor- Adonai, que el hombre no triunfe:
sean juzgados los gentiles en tu presencia.
Señor- Adonai, infúndeles terror,
y aprendan los pueblos que no son más que hombres.

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