san Antonio predicando pintura de Alonso de Arco

Día 7: El trato con los demás

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

Pedimos a nuestro ángel de la guarda, a nuestro ángel personal, protección del lugar y de nuestra persona, pedimos que nos lleve en espíritu a la presencia de los ángeles que rodean a san Antonio de Padua para recibir las gracias y los mensajes que nuestro espíritu anhela.

Oración del Padrenuestro y el Avemaría

Oración inicial

Recibo todo lo que el Espíritu Santo, envíe para mí, para mi familia, para la ciudad y la nación en la que vivo, para el planeta tierra, para el universo, por medio de Antonio; para que de esta forma guiado por ese mismo Espíritu, sea, como lo fue el mismo Antonio de Padua, un faro de luz y amor para todos los que me rodean. Amén.

De la vida de San Antonio

De junio de 1229 a junio de 1230, la Iglesia promovió una gran misión pacificadora en la región del norte de Italia, en el Véneto. Esta región estaba azotada por guerras entre las distintas familias de la nobleza. De esta manera llegó a Padua Allí estableció su residencia y empezó una labor de predicación, enseñanza y de pacificación., atormentada por los crueles enfrentamientos entre facciones de la nobleza.

En 1230 viajó a Roma donde predicó al Papa y a la curia. Allí estuvo varios meses. No importa tanto quién tenemos adelante sino nuestra actitud interior y nuestra conciencia de quiénes somos. Entonces respetamos a todos los que la Vida y Dios nos pone en el Camino.

De los Escritos de San Antonio

Lo entregó Judas, uno de sus discípulos. ¿Puede acaso el Creador ser comprado o vendido por una criatura? Y tú dices: ¿Qué me queréis dar y os lo entregaré?

Dime ¿en qué te perjudicó y qué mal te hizo, pues dices: os lo entregaré? ¿Te olvidaste de aquella incomparable humildad del Hijo de Dios y de su pobreza voluntaria? ¿Su bondad y afabilidad? ¿Su dulce predicación y prodigiosos milagros? ¿Aquellas tiernísimas lágrimas derramadas sobre la ciudad de Jerusalén y la muerte de Lázaro? ¿Y el privilegio de haberte escogido para ser Apóstol haciéndote su familiar y amigo?

Éstas y otras cosas semejantes tendrían que ablandarte el corazón e inducirte a piedad para no decir: Y os lo entregaré. ¡Oh, cuántos son hoy los “Judas Iscariotes” que traicionan la verdad por obtener cualquier ventaja temporal! ¡Traicionan al prójimo con el beso de la adulación (…)

Te rogamos, Señora nuestra, Madre de Jesús, que tú, Estrella de la mañana, alejes con tu esplendor la niebla (…) que cubre la tierra de nuestra alma; tú que eres la luna llena, llena nuestro vacío, ahuyenta las tinieblas de nuestros pecados, a fin de que merezcamos llegar a la plenitud de la vida eterna, a la luz de la gloria imperecedera. Ayúdenos el Señor, que te creó para que seas nuestra luz. A Él sea dada la honra y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Reflexión: Hablábamos ayer de los compañeros de Camino. Otra actitud que Antonio nos enseña con su ejemplo no solo es reconocer que nunca vamos solos, que nuestra misión la cumplimos con la ayuda de los demás, sino también que esas personas están ahí no por casualidad, sino porque son maestros o alumnos en nuestro Camino. Por eso tenemos que ser sumamente respetuosos con los que tenemos al lado, insisto, que no llegaron a nuestra existencia por pura casualidad.
Así la familia, saber tratarlos con respeto y ponerlos en el lugar adecuado. No ser serviles, ni avergonzarnos de ellos. Respeto a ti mismo y, en consecuencia, a ellos. Es la primera escuela de la Vida: la Familia. ¿Cómo son las relaciones con tu familia?
La segunda escuela sumamente importante son los amigos. ¿Cuántos tienes? ¿Cómo los respetas? ¿Cómo los tratas? ¿Buscas sacar ventaja de ellos?
La tercera escuela es la misión en la vida el trabajo. ¿Cómo te llevas con tus compañeros de trabajo? ¿Los respetas? A tus jefes, a tus empleados…
Antonio veía más allá de las apariencias; no veía solo caras, veía corazones. Desde su amor trataba con igual dignidad y les anunciaba su mensaje con el mismo ardor a unos que a otros, al Papa como a los demás seres humanos con los que se encontraba. ¿Haces acepción de personas? ¿Eres prejuicioso en el trato con las personas que conoces?

Oración por intercesión de Antonio de Padua

Oh Dios que siguiendo el ejemplo de Antonio de Padua respete y trate con dulzura a cada ser humano que la Vida ponga en mi Camino. Arranca de mi corazón todo prejuicio y todo egoísmo que me impida ver los corazones de mis compañeros de Camino. Amen. Así sea.

Te invito a recitar la famosa oración que millones de personas recitan recordando a Antonio de Padua en todo el mundo, haz clic aquí

Invocación final:

Agradezco a mi ángel de la guarda por su compañía y por la protección del lugar, de mi energía durante este diálogo con Antonio de Padua y de los ángeles que le rodean.

Termino con el Padrenuestro y el Avemaría.

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