Rectitud de corazón. En este salmo están retratadas las principales características morales del ser humano de bien: el político, el comerciante, el empresario, el obrero…, en todos lados hay personas de bien…
Las actitudes de este tipo de personas se pueden resumir en esta profunda y rica expresión, “rectitud de corazón”.
Como toda expresión sintética, algunos la pueden malinterpretar. Pero si quieres que Dios te reciba en su casa, no puedes caminar por el mundo sin tener un corazón recto.
Hasta mañana. Paz y bien.
SALMO 101-100
Voy a cantar la bondad y la justicia,
para ti es mi música, Señor;
voy a explicar el camino perfecto:
¿cuándo vendrás a mí?
Andaré con rectitud de corazón
dentro de mi casa;
no pondré mis ojos
en intenciones viles.
Aborrezco al que obra mal,
no se juntará conmigo;
lejos de mí el corazón torcido,
no aprobaré al malvado.
Al que en secreto difama a su prójimo
lo haré callar;
ojos engreídos, corazones arrogantes
no los soportaré.
Pongo mis ojos en los que son leales,
ellos vivirán conmigo;
el que sigue un camino perfecto,
ése me servirá.
No habitará en mi casa
quien comete fraudes;
el que dice mentiras
no durará en mi presencia.
Cada mañana haré callar
a los hombres malvados,
para excluir de la ciudad del Señor
a todos los malhechores.