img_0140Sé agradecido. Agradece conscientemente. A la vida. Recuerda la famosa canción, gracias a la Vida.

A tu familia, a tus amigos, a tus compañeros, a tus conocidos…

A la naturaleza, al sol de cada día, a la lluvia, a la nieve, a los colores del atardecer, ….

A Dios que te ha regalado todo lo que acabas de agradecer…

Deja de mirar el pequeño grano negativo que te entró en el ojo, y si se te ocurre verlo y si quieres darle importancia, dale gracias también a ese aspecto negativo que tiendes a magnificar…, gracias de forma consciente.

Ser agradecido multiplica los dones que necesitas para ser más feliz.


Salmo 92- 91

Es bueno dar gracias al Señor
y tocar para tu nombre, oh Altísimo,
proclamar por la mañana tu misericordia
y de noche tu fidelidad,
con arpas de diez cuerdas y laúdes
sobre arpegios de cítaras.

Tus acciones, Señor, son mi alegría,
y mi júbilo, las obras de tus manos.
¡Qué magníficas son tus obras, Señor,
qué profundos tus designios!
El ignorante no los entiende
ni el necio se da cuenta.

Aunque germinen como hierba los malvados
y florezcan los malhechores,
serán destruidos para siempre.
Tú, en cambio, Señor,
eres excelso por los siglos.

Porque tus enemigos, Señor, perecerán,
los malhechores serán dispersados;
pero a mí me das la fuerza de un búfalo
y me unges con aceite nuevo.
Mis ojos no temerán a mis enemigos,
mis oídos escucharán su derrota.

El justo crecerá como una palmera
y se alzará como un cedro del Líbano:
plantado en la casa del Señor,
crecerá en los atrios de nuestro Dios;

en la vejez seguirá dando fruto
y estará lozano y frondoso,
para proclamar que el Señor es justo,
que en mi Roca no existe la maldad.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.