Una de las conclusiones que saca Juan, el vidente del libro del Apocalipsis, es bastante obvia. El que está al lado de Dios vive en continua alabanza, alegría y acción de gracias. Porque está en manos del que gobierna Cielo y Tierra. Puedes repetir esta jaculatoria-mantra-decreto: «Alegrémonos, gocemos y demos gracias«.
Feliz jornada, bendiciones.
CÁNTICO DEL APOCALIPSIS (19, 1-2. 5-7)
Aleluya. La salvación y la gloria y el poder son de nuestro Dios,
porque sus juicios son verdaderos y justos. Aleluya.
Aleluya. Alabad al Señor, sus siervos todos,
los que le teméis, pequeños y grandes. Aleluya.
Aleluya. Porque reina el Señor, nuestro Dios, dueño de todo, Aleluya.
alegrémonos y gocemos y démosle gracias. Aleluya.
Aleluya. Llegó la boda del Cordero,
su esposa se ha embellecido. Aleluya.