¿Qué tal amigos?
Vamos a hablar hoy de cuatro pasos que me proponía una persona amiga cristiana, para llegar a conocer personalmente a Dios. ¡Casi nada! Yo les he dado mi toque personal.
Fíjense en estas etapas:
La primera: Dios te creó a su imagen y semejanza. ¿Qué quiere decir esto? Que no podrás ser plenamente feliz si no desarrollas eso que llevas en tu interior que es ser «imagen y semejanza de Dios». Para ello tienes que tener una relación, un trato con «Ese» que te creó; sería la primera etapa.
La segunda el hombre se entretiene: los cristianos dicen es un pecador separado de Dios, pero yo creo que no es así. En realidad se entretiene tanto en lo material, en lo aparente, en lo que le entra por los sentidos, que se olvida de su esencia, de lo más íntimo, de que es un ser espiritual. Y que, por lo tanto no capta, –al mirar sólo lo que percibe por los sentidos– cuál es su esencia; no puede experimentar plenamente lo que es: un ser espiritual unido íntimamente a Dios, a su Creador.
Tercer paso o tercera etapa: hay formas de descubrir esa esencia divina. Una de ellas es encontrarse con Cristo, pero hay muchas más. Lo que sí está claro es que la Vida, Dios, –como quieras llamarle– te va a dar la oportunidad de que te reencuentres con esa ese esencia íntima, con Dios, con el Creador, con el Amor en mayúsculas, del que estamos hablando.
Cuarta etapa tenemos que hacer la experiencia personal y experimentarlo. No basta solo con dogmas, ideas o principios. Es entrar en comunión, en tu corazón, en lo más íntimo y descubrir ahí, a Dios, descubrir ahí. tu esencia. Encontrarte de una forma viva y real con Dios.
Y así llegamos a la plenitud el ser humano –seguramente ya lo has escuchado alguna vez más en esta columna de Vida y Teología– sólo puede realizarse plenamente, sólo puede ser feliz, en el reencuentro con su esencia, que es espiritual, que es mística. Si se entretiene demasiado –como decíamos antes– con lo aparente, con lo externo, con lo material, se distrae tanto que sale del camino y todo son tropezones, golpes, heridas, dolores que se convierten en sufrimientos.
Sigue estos cuatro pasos, experiméntalos y después ,si quieres, escríbeme o cuéntame a través de las redes sociales o por donde tú quieras.
Paz y Alegría, nos vemos dentro de siete días.
Resumamos los Cuatro Pasos:
Primer Paso: Reconocer y Aceptar que somos Seres Creados a Imagen y Semejanza de Dios
Segundo Paso: Reconocer y Aceptar que hay obstáculos naturales y poderosos que nos distraen y nos hacen olvidar esa Realidad
Tercer Paso: Reconocer y Aceptar que la Vida nos da Oportunidades, si estamos atentos, para Realizarnos como seres Espirituales
Cuarto Paso: No quedarnos con Ideas y Dogmas si no hacer la Experiencia, poner en Práctica en la vida Real los medios Espirituales.
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