El dos de noviembre es día de oración por los fieles difuntos, por nuestros familiares, amigos, conocidos…., por los que fueron nuestros compañeros de peregrinar en el planeta tierra y ya no están con nosotros, ya volaron.
El salmo que les propongo es esta maravilla de composición que esponja el alma, da paz y serenidad. Es recomendable rezarlo, en este día o cualquier día que oremos por los que se han ido, al menos tres veces; e incluso nueve veces teniendo presente lo que celebramos, los seres queridos que estamos despidiendo o hemos despedido. El banquete está preparado.
El mantra de estos días puede ser: Familiares, amigos y conocidos que han dejado este mundo, descansen en paz, amén-amén-amén.
Paz y bien. Bendiciones.
Mientras no se acerca ese día, puedes hacer una oración de tres días por los difuntos haz clik aquí
Salmo 23-22
El Señor es mi pastor nada me falta
En verdes praderas me hace reposar,
me conduce a fuentes tranquilas
y recrea mis fuerzas.
Me guía el sendero adecuado
haciendo gala su oficio.
Aunque camine por lúgubres cañadas,
ningún mal temeré, porque tú vas conmigo;
tu vara y tu bastón me defienden.
Preparas ante mí una mesa
en presencia de mis enemigos;
me unges con perfume la cabeza,
y mi copa rebosa.
¡La bondad y el amor me escoltan
todos los días de mi vida!
Y habitaré en la casa del Señor
a lo largo de mis días.