Bariloche imagen de Claudia Bofill
Reflexiones para una Cuarentena, en tiempo de Cuaresma

Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el demonio.
Después de ayunar cuarenta días con sus cuarenta noches, sintió hambre.
Y el tentador, acercándose, le dijo: «Si tú eres Hijo de Dios, manda que estas piedras se conviertan en panes».
Jesús le respondió: «Está escrito: El hombre no vive solamente de pan, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios».

Dice, Hesiquio el Sinaíta, un Padre del Desierto: Con la forma cómo ha vencido, el Maestro nos enseñó a nosotros también cómo llevar la lucha contra los espíritus del mal: en la humildad, el ayuno, la oración (Mt 17,21) (…)
El que emprende el combate interior, cada instante debe blandir estos cuatro elementos: humildad, extrema atención, refutación y oración.

Son herramientas poderosas para tener la parte materialista, la gula, los vicios de la carne, del cuerpo en su lugar…,
Ahorra a aplicarlas y ver los resultados…
Te invito a leer, desde esta perspectiva, la primera parte del salmo 17 A haciendo clik aquí.
Jaculatoria- Mantra- Decreto- Afirmación: El hombre no vive solo de pan.

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