
En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él.
+++
«Corazones ambiciosos, ojos altaneros, aspirar a más de lo que uno puede…» alejan de Dios, sin embargo, un corazón de niño que se siente en brazos de Dios Padre-Madre, recibe el cariño y la protección que necesita, –como dice el salmista–, como niñ@ en brazos de su madre.
Salmo de absoluta confianza. Jesús abraza a un niño y se identifica con él.
Afirmación: Como un niño en brazos de su madre.
Hasta mañana. Paz y Alegría
Una oración que conecta directamente con este Salmo, es la llamada oración de abandono. Hay dos que son espectaculares y que te recomiendo vivamente, haz click aquí.
Escúchalo:
Salmo 130
Señor, mi corazón no es ambicioso,
ni mis ojos altaneros;
no pretendo grandezas
que superan mi capacidad;
sino que acallo y modero mis deseos,
como un niño en brazos de su madre.
Espere Israel en el Señor
ahora y por siempre.
***
¿Ya conoces nuestro canal de YouTube? ¡Suscríbete
Quizás te interese también,