En las distintas religiones hay personas que tienen la misión de mantener el fuego de la oración y la súplica viva las veinticuatro horas del día. En la iglesia católica lo hacen los monjes y monjas consagradas. En Varanasi hay familias consagradas a mantener vivo el fuego sagrado con el que se queman los cuerpos para que se purifiquen…
Mantener viva la presencia de Dios en el corazón da una dimensión espiritual a tu existencia, única.
Hasta mañana, bendiciones.
SALMO 134-133
Y ahora, bendigan al Señor,
todos los siervos del Señor,
que pasan la noche
en la casa del Señor.
Levanten las manos hacia el santuario
y bendigan al Señor.
El Señor te bendiga desde Sión,
el que hizo el cielo y la tierra.