Imagen de Rocío Abril Viveros

Y el ángel le dijo a los pastores:  esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y acostado en un pesebre».
+++
Salmo real que nos trae a la memoria la escena en la que un hombre de poder mira a un preso que está a su lado atado, golpeado, humillado, despreciado… y le pregunta: «Entonces, ¿tú eres rey?» . El hombre con rostro ensangrentado, llamado Jesús, le responde: «Tú lo has dicho, yo soy rey, para eso he nacido, para ser rey«.
Observa, mira, analiza desde el Alma y verás que hay detrás de las cosas de la realidad aparente, porque, dice el salmo, «tú eres mi hijo«.
Decreto: Pídemelo, te daré en herencia las naciones.

Salmo 2

¿Por qué se amotinan las naciones,
y los pueblos planean un fracaso?

Se alían los reyes de la tierra,
los príncipes conspiran
contra el Señor y contra su Mesías:
«rompamos sus coyundas,
sacudamos su yugo».

El que habita en el cielo sonríe,
el Señor se burla de ellos.
Luego les habla con ira,
los espanta con su cólera:
«yo mismo he establecido a mi Rey
en Sión, mi monte santo».

Voy a proclamar el decreto del Señor;
El me ha dicho:
«Tú eres mi hijo:
yo te he engendrado hoy.

Pídemelo:
te daré en herencia las naciones,
en posesión, los confines de la tierra:
los gobernarás con cetro de hierro,
los quebrarás como jarro de loza».

Y ahora, reyes, sed sensatos;
escarmentad, los que regís la tierra:
servid al Señor con temor,
rendidle homenaje temblando;
no sea que se irrite, y vayáis a la ruina,
porque se inflama de pronto su ira.

¡Dichosos los que se refugian en él!

Quizás te interese también,

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *