En muchos lugares celebran la fiesta de la Candelaria o de las Candelas. Nace de la Presentación de Jesús en el templo y la purificación de su mamá María, un ritual judío que se realizaba a los ocho días del nacimiento de un niño. Cuando José llevó a su esposa María a purificarse y a presentar a su hijo, -ambos rituales se hacían en el Templo- se encontraron con dos personas que reconocieron a Jesús, la profetisa Ana y el anciano Simeón. Este tomó en brazos al niño Jesús y dijo que el niño sería «luz para alumbrar a las naciones”.
Ser luz significa que no has dejado apagar ni esconder la llama resplandeciente que hay en tu corazón así iluminas todos los caminos que pisas.
Ser luz, significa, que el calor de tu corazón sigue vivo, que las semillas de paz, de bondad, de verdad, dan fruto y crecen en ti y en las personas que hay a tu alrededor.
Sigue siendo Luz, como Jesús. Que en tu corazón nunca entren las sombras… Para conocer mejor la fiesta de las Candelas, haz clik AQUÍ
Feliz día de las Candelas. Feliz día de Luz. Hasta mañana.
SALMO 27-26 I
El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida,
¿quién me hará temblar?
Cuando me asaltan los malvados
para devorar mi carne,
ellos, enemigos y adversarios,
tropiezan y caen.
Si un ejército acampa contra mí,
mi corazón no tiembla;
si me declaran la guerra,
me siento tranquilo.
Una cosa pido al Señor,
eso buscaré:
habitar en la casa del Señor
por los días de mi vida;
gozar de la dulzura del Señor,
contemplando su templo.
Él me protegerá en su tienda
el día del peligro;
me esconderá en lo escondido de su morada,
me alzará sobre la roca;
y así levantaré la cabeza
sobre el enemigo que me cerca;
en su tienda sacrificaré
sacrificios de aclamación:
cantaré y tocaré para el Señor.