Como es arriba es abajo, imagen de Ruth Dacunda

Jesús, dijo a sus discípulos: Habéis oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo os digo que no hagáis frente al que os hace mal: al contrario, si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, preséntale también la otra.
+++
Los planes de Dios subsisten por siempre, como decíamos ayer, porque El los mira.
La mirada de Dios hace que el proyecto, que sale de su boca llegue a buen término. La fuerza está en su mirada.
Quizás tenga razón el refrán popular cuando dice, “el ojo del amo engorda el ganado”.
Mantra: El Señor mira desde el cielo, se fija en todos los hombres.

Escúchalo o léelo:

Paz y Alegría

Salmo 32 B

Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor,
el pueblo que él se escogió como heredad.

El Señor mira desde el cielo,
se fija en todos los hombres;
desde su morada observa
a todos los habitantes de la tierra:
él modeló cada corazón,
y comprende todas sus acciones.

No vence el rey por su gran ejército,
no escapa el soldado por su mucha fuerza,
nada valen sus caballos para la victoria,
ni por su gran ejército se salva.

Los ojos del Señor están puestos en sus fieles,
en los que esperan en su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre.

Nosotros aguardamos al Señor:
él es nuestro auxilio y escudo;
con él se alegra nuestro corazón,
en su santo nombre confiamos.

Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti.

También te puede interesar,

¿Dónde comienza la curación?

El Camino para curarse

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *