Volcan Popocatépetl- Puebla (México), imagen de Rafael Barquero

Salmo con tres cantos preciosos:
El primero se puede resumir con esta frase: «mi alma está sedienta de ti«;
el segundo con esta: «me saciaré de manjares exquisitos«.
Ante esto, sería la tercera, una vez más, los enemigos no podrán, » a la sombra de tus alas canto con júbilo«.
El corazón humano no calma su sed, no sacia su hambre hasta que descansa en Dios, «a la sombra de sus alas«.
Simbólico y hermoso salmo, del que se puede sacar mucha agua y mucho alimento para el espíritu.
Decreto: «Mis labios te alabarán jubilosos«. o también: Mi alma está sedienta de ti.
Paz y Alegría. Hasta mañana.

Salmo 62

¡Oh Dios!, tú eres mi Dios, por ti madrugo,
mi alma está sedienta de ti;
mi carne tiene ansias de ti,
como tierra reseca, agostada, sin agua.

¡Cómo te contemplaba en el santuario
viendo tu fuerza y tu gloria!
Tu gracia vale más que la vida,
te alabarán mis labios.

Toda mi vida te bendeciré
y alzaré las manos invocándote.
Me saciaré de manjares exquisitos,
y mis labios te alabarán jubilosos.

En el lecho me acuerdo de ti
y velando medito en ti,
porque fuiste mi auxilio,
y a las sombras de tus alas canto con júbilo;
mi alma está unida a ti,
y tu diestra me sostiene.

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