JOB: PRUEBA Y ENFERMEDAD

La historia de Job, como la de cualquier ser humano, empezó en el mundo espiritual. En el libro de Job Dios dice a Satanás:«¿No has considerado a mi siervo Job?» Este respondió: «No tu siervo, sino mi siervo. Lo has bendecido, de esta manera todos pueden decidir ser creyentes. pero toca lo que tiene, verás si que blasfema contra Ti en tu misma presencia» (Job 1, 6.8-11).

Las Pruebas de Job y su respuesta

1. La pérdida de todos los bienes materiales

Job quedó arruinado en una sola jornada (1,13-17). Robos, catástrofes naturales y guerras. Hasta la más horrenda: la muerte de sus diez hijos (1,18-19).

¿Cómo reaccionó Job? Rasgó su manto, se rasuró el pelo y se postró en tierra diciendo: “El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó; Bendito sea el nombre del Señor» (vv. 20, 21).

2. La Prueba Física de Job, la enfermedad

Aún más difícil se le declaró una dolencia abominable y repugnante, semejante a la lepra (cap. 2:1-8), que le dejó sentado en medio de ceniza y basura (Job 2, 7-8). Los tormentos físicos asustan primero a su esposa y luego a sus amigos. ¿Cómo reaccionó Job a esta segunda prueba? Aunque Dios parece no escuchar la voz de Job, este concluye: ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos?» (2:10).

3. La reacción de su esposa, fin del matrimonio

Job tenía un matrimonio feliz. Sin hijos, después de haber engendrado diez, ante su esposo arruinado y enfermo, su esposa exclama: «¿Aún retienes tu integridad? Maldice a tu Dios, y muérete”. Job contestó: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios (Job, 2,9-10)

4. La pérdida de la buena reputación, de su fama y honra

Todos murmuran y le difaman con duras palabras: ”…despojado…como extraños se apartaron de mí…se olvidaron de mi…me tuvieron por extraño…forastero fui yo…mi aliento vino a ser extraño a mi mujer…». «Me ha despojado de mi gloria, y quitado la corona de mi cabeza» (19:13-16).  ¿Cómo fue la respuesta de Job?: «Yo sé que mi Redentor vive» (19, 25).

5. Los amigos y hermanos se apartan de él.

Job tenía amigos, que lloraron amargamente sentándose con él en la tierra por siete días y siete noches: «…porque veían que su dolor era muy grande» ( 2: 12-13). Pero luego le atormentan con sus reflexiones y acusaciones. Job terminó diciéndoles: “Amigos, tened compasión de mí, tened compasión de mí» (19: 21)

6. La prueba espiritual de Job

Por si faltara algo apareció Eliú que dijo a Job: «Espérame un poco, y te mostraré que todavía hay más que decir en favor de Dios» (Job 32-36, 2). Este contestó respetuosamente ante  las acusaciones de Eliú. Job inclinó la cabeza quedó silencioso aceptó el mensaje de  Dios.

7.  Dios se manifiesta a Job.

A partir del capítulo 38, Dios habla con Job. Este reconoce:”antes te conocía solo de oídas pero ahora mis ojos te han visto” 42. Dios le pide que haga una oración por los amigos que le acusaron: «Y quitó Jehová la aflicción de Job, cuando él hubo orado por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job. Y vinieron a él todos los que antes le habían conocido, y comieron con él pan en su casa, y se condolieron de él, y le consolaron de todo aquel mal que había padecido. Y Dio le bendijo con un estado mejor que el primero, porque tuvo catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas, y tuvo siete hijos y tres hijas» (cap. 42: 10-13)