
El Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar integro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león. El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Tomado de la carta de Pablo de Tarso a Timoteo
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Hoy es la fiesta de Pedro y Pablo, los dos pilares sobre los que se apoya el cristianismo. Pedro, elegido en persona por Jesús para ser cabeza del grupo de los apóstoles y Pablo, que no conoció a Jesús personalmente, sino en espíritu y es el apóstol que abrió el mensaje de Cristo a otras culturas y al mundo.
Los dos aspectos sobre los que camina el ser humano: las estructuras y los carismas; el poder de lo humano y la fuerza del espíritu. Los dos necesarios para caminar con las dos piernas. Por cierto, precioso salmo para celebrar esta fiesta.
Te propongo que repitas este mantra del salmo a cada estrofa: El Señor me libró de todas mis ansias
Salmo 33 A
Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloria en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R.
Proclamad conmigo la grandeza del Señor,
ensalcemos juntos su nombre.
Yo consulté al Señor, y me respondió,
me libró de todas mis ansias. R.
Contempladlo, y quedaréis radiantes,
vuestro rostro no se avergonzará.
Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha
y lo salva de sus angustias. R.
El ángel del Señor acampa
en torno a sus fieles y los protege.
Gustad y ved qué bueno es el Señor
dichoso el que se acoge a él.
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