Dijo Jesús a sus discípulos: Cargad con mi yugo y aprended de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrareis alivio.
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En tres tiempos el salmista primero impreca a los enemigos injustos que le atacan, en el segundo describe el motivo de su imprecación para terminar, –en el tercer tiempo–, con una alabanza a Yhavé – Dios que siempre está presente en su vida.
(Miguel significa «¿quién como Dios?) y que aquí se entreve la misión de este arcángel que lucha con su espada de luz contra la oscuridad y el mal.
La jaculatoria de hoy: Señor quién cómo Tú que defiendes al débil.
Paz y Bien hasta mañana.
Léelo o escúchalo:
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Salmo 34 A
Litiga, Señor- Adonai, contra los que litigan contra mí,
ataca a mis atacantes;
empuña el escudo y la adarga,
levántate y ven en mi ayuda;
blande la espada y la pica
contra mis perseguidores;
dime: ¡Yo soy tu victoria!
Sufran una derrota vergonzosa
los que me persiguen a muerte,
retrocedan humillados
los que planean mi desgracia;
sean como tamo al viento,
acosados por el ángel del Señor- Adonai;
sea su camino oscuro y resbaladizo
perseguidos por el ángel del Señor.
Porque sin motivo me tendían redes
sin motivo me cavaban zanjas mortales.
Que los sorprenda una desgracia imprevista,
que los enrede la red que escondieron
y caigan dentro de la zanja.
Yo festejaré al Señor- Adonai
y celebraré su victoria.
Todos mis huesos proclamarán:
Señor- Adonai, ¿quién como tú,
que defiendes al débil del poderoso,
al débil y pobre del explotador?
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Gracias, Karina. Que la Luz de la espada de San Miguel arcángel abra los caminos que tienes delante y puedas avanzar por ellos con paz y alegría.
Que maravilla y que bendición ahora también poder escuchar estos audios , muchas gracias Padre Gumersindo , por este trabajo incansable al servicio de tu rebaño. Gracias por no darse por vencidos con muchos de sus seguidores entre los que me incluyo , gracias por ayudarme a reencontrarme con Dios , bendiciones para todo el grupo Gicem